viernes, 16 de noviembre de 2012


-¿No puedes simplemente evitar lastimarme? - masculló Domii.
-¿Y cuestionar a la emperatriz? ¡Jamás!
-¿Es que no puedes pensar por ti mismo?
-Pero ella...
-Ella puede estar equivocada. ¿Por que lo haces? ¿Por que hieres a todo aquel que se te acerca? ¿ Por que haces caso?
-Porque ella me enseñó esto.
-Pero, ¿por qué lo haces?
-No lo sé.
-Todas las cosas que no sabes por qué las haces puedes elegir no hacerlas.
-Pero es mi deber.
-¿Te sientes bien haciéndolo?
-Creía que sí.
-Eso es una razón para hacerlo entonces, no porque sea un deber. Nadie puede  imponernos deberes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario