domingo, 18 de agosto de 2013

Tenés razón, hace años luz no escribo (sé que es una unidad de medida, no soy tan bestia che). Sé me pego el ché, no sé, ha de ser Cortázar, últimamente es el 40% de mi vida, amo tenerlo siempre conmigo. Y esa manera que me hace amar el café, los cigarros, las noches en Buenos Aires y el boxeo, esa cosa Rioplatense epoca pre-celularcomputadorarevolciónsexualypornoenelmp4paramirarenelomnibusenlugardeleerunlibrocomohabiaelabuelito. Creo que es algo personal esta cosa anti-tecnología que me dió, o mejor dicho el uso patético que le da la gente a mi alrededor. Sé que no debería quejarme tanto, pero... no, no me voy a quejar. Me siento reprimida. 
Aunque también me siento libre en muchas cosas. Básicamente nunca escribí para hacerlo público, ahora si esto esta on-line es por vos, que te interesó leerlo. Pero el escribir todos los días y tomarme mi tiempo para existir me hace bien. Es cómico, te hago una cuenta matématica practicamente sin problemas, nunca me llevé una materia seria, entiendo todo en cuanto me lo explican. Pero demoro demasiado en entender sola. Especialmente como me siento (sacando esas cosas que ya sé y no quiero reconocer).


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